La sostenibilidad es un concepto que se está convirtiendo en fundamental en nuestra sociedad actual, sobre todo por los retos climáticos y ambientales a los que nos enfrentamos. Además, este concepto incluye un componente social.
En ocasiones anteriores hemos hablado del Plan de Responsabilidad Social, que puede ayudarnos a conseguir que nuestra iniciativa emprendedora sea sostenible. Sin embargo, en muchos casos puede que no podamos dedicar a ello el tiempo necesario. Por eso, proponemos algunos consejos que pueden ayudar a que tu iniciativa sea, poco a poco, cada vez más sostenible:
1. Promueve el reciclaje, la separación de residuos y su gestión eficiente: reduce la cantidad de residuos generados por tu actividad al máximo posible. Después, intenta reutilizar los residuos y, por último, asegúrate de que cuentas con los recipientes necesarios para realizar los procesos de recogida de manera correcta y de que todas las personas involucradas saben cómo utilizarlos. Guíate por la regla de las 3R: Reduce, Reutiliza, Recicla.
2. Utiliza papel reciclado y con consciencia ambiental: imprime solo lo necesario y utilizando ambas caras del papel, ya que supone reducir notablemente el gasto de este material. Puedes reutilizar el pape: para hacer anotaciones, dejar notas a los compañeros, etc., podemos utilizar trozos de hojas que ya hayan sido utilizadas. Cuando el folio ya no de para más, podemos utilizarlo para otras cosas, como envolver objetos, realizar manualidades, etc.
3. Compra los materiales en tu entorno más cercano: así puedes reducir los costes de transporte y ayudarás a mantener redes de consumo local, con lo que tu acción será doblemente sostenible.
4. Evita el uso de botellas de agua de plástico: una opción es que cada persona involucrada en la actividad diaria de tu iniciativa empresarial cuente con un vaso, taza, botella de cristal, etc., que pueda utilizar todos los días.
5. Organiza reuniones a través de Internet: si utilizas distintos portales o aplicaciones para realizar reuniones vía videoconferencias, reducirás los costes de transporte y la emisión de gases contaminantes que generan.